Sin saberlo, puedes tener todas las herramientas y materiales necesarios para elaborar un excelente abono ecológico. Quédate con estos consejos sobre los mejores materiales para crear tu propia composta casera de la mejor calidad y dar más vida a tus cultivos.
Materias primas para la obtención del compostaje.
Para crear el mejor compost se puede disponer de una gran variedad de materiales orgánicos.
Lo recomendable es usar elementos de rápida descomposición natural como hojas, césped o hierba; incluir elementos de más lenta descomposición como los restos de frutas, legumbres, hortalizas, plantas, etc.
También puedes incluir otros de muy lenta descomposición, entre los cuales podrás encontrar una amplia variedad como ramas, aserrín, cáscaras de huevo, semillas grandes (como la del aguacate o los duraznos).
Dependiendo de las características que quieras obtener con los diferentes tipos de composta y los beneficios que busques, puedes usar, entre otros, los que te enseñamos a continuación.
Restos de cosechas.
Los sobrantes vegetales jóvenes como hojas, frutos, tubérculos, etc. son abundantes en nitrógeno y pobres en carbono y son un componente esencial de toda composta bien hecha.
Los sobrantes vegetales más adultos como troncos, ramas, tallos, etc. poseen menos nitrógeno.
Las ramas de poda de los frutales.
Para obtener buenos resultados con este material es indispensable que sea triturado antes de ser introducido al compost ya que en fragmentos de gran tamaño el tiempo de descomposición es más largo.
Hojas de árboles y plantas.
El tiempo de descomposición de las hojas puede variar entre 6 meses y dos años. Lo más recomendable es combinarlas en pequeñas cantidades con otros materiales para facilitar su descomposición y también puedes triturarlas en pequeños fragmentos para ayudar a acelerar el proceso natural de biodegradación por parte de los diferentes microorganismos que actúan sobre ellas.
Estiércol animal.
El más común es el de vaca, aunque también es utilizado el estiércol de caballo, de oveja, gallinaza y los purines. En resumen, podrías usar estiércol de animales de corral.
No se debe usar heces de otros animales que sean domésticos y mucho menos de personas.
Complementos minerales.
Son utilizados para corregir la falta de estos minerales en ciertas tierras. Las que más destacan son las rectificaciones de caliza, magnésicas, los fosfatos naturales, las rocas ricas en potasio y las silíceas.
Restos urbanos.
Este contempla todos los residuos orgánicos resultantes de cocinas como frutas, hortalizas y restos de animales de matadero (adecuadamente seleccionados, porque no todos son aptos para usarse). Incluso puedes sacar provecho del material sobrante del proceso de trabajo con la madera (troncos y aserrín), que para estas empresas no es más que basura pero para tu compost es un buen elemento.
Ya puedes contar con todos estos materiales para que puedas hacer un buen compost en tu propia casa, ayudar en el cuidado del medio ambiente y sacar el máximo provecho a tus cultivos.